A nadie se le escapa que estamos viviendo tiempos difíciles, tanto que ya se plantea como el evento más grave desde la segunda guerra mundial. Es un periodo que requiere medidas extraordinarias en todos los aspectos de la vida y, por supuesto de la empresa. En esta entrada vamos a analizar 4 posturas corporativas que hemos encontrado de manera recurrente en la comunicación de muchas empresas en estas semanas tan marcadas por la alerta y el coronavirus. Para ello hemos considerado que no todas son estrategias adecuadas, de hecho, algunas no solo no son adecuadas sino que ni siquiera son fruto de una reflexión estratégica, sino de una manera impulsiva de reaccionar ante esta coyuntura.
Pero, sin más preámbulos, vamos a plantear estas posturas con un único spoiler, empezamos por las que consideramos peores para ir avanzando hacia las más adecuadas.
· Adecuar
Pero no ha sido solo cosa de pymes, también ha habido empresas de la talla de Uber Eats. A principios de marzo, la empresa protagonizó una polémica por su promoción de 15€ de descuento con el código NOTELAJUEGUES.
El problema es que, aunque animaran a que los usuarios no se la jugaran y se quedaran en casa, los repartidores sí que se exponían, reaccionando con frases tan contundentes como “eso es lo que vale nuestra salud, 15€”
Bien es cierto que a nivel internacional han tomado medidas interesantes, como el envío gratis de pedidos sensibles, pero en el blog español no podemos encontrar (al menos de momento) nada al respecto.
Esto puede darse por por dos motivos, por puro inmovilismo, o por una apuesta por alejar la conversación del coronavirus.
Por otro lado, gran parte del mundo de la moda y, más en concreto las empresas del grupo Inditex, no ha llevado al frente su compromiso en la lucha contra el Covid-19. La labor social del grupo y de Amancio Ortega ha ido por otros derroteros y no ha calado en toda su comunicación, como ha podido ser en muchos otros casos. Podemos echar una ojeada a los sitios de sus marcas con distintos grados de implicación, aquí ponemos de ejemplo a Massimo Dutti, marca que no ha dejado que esta crisis se dejara notar en sus muros de Facebook o Instagram.
En este periodo es espacialmente arriesgado aventurar qué giros de comunicación se deben más a la repentina improvisación y cuáles son fruto de una reflexión bien meditada.
Sin embargo, hay que reconocer que en las últimas semanas le han dado una vuelta a su comunicación y han sabido reorientarla bajo el lema “quedarse en casa da mucha vida”.
Y es que ahora nos toca reinventarnos y adaptar nuestros mensajes, por buenos que fueran. Que se evidencie que se ha trabajado en ellos está en nuestras manos.
Puede parecer lo mismo que improvisar pero parafraseando a Les Luthiers, parecido no es lo mismo. Me refiero aquí a las empresas que han sabido redefinir sus estrategias de manera acertada y consecuente. Priorizar la postura corporativa, no puede ser cosa de una publicación o de un post, debe afectar al tono general y eso puede incluir desde medidas tan radicales como la cancelación temporal de la publicidad por parte de Coca-Cola (que no la comunicación en sus redes sociales) a la creación de contenidos específicos para la crisis como ha hecho IKEA.
Cabe decir que no se ha quedado ahí, desde el lanzamiento de esa pieza, todos los posts están adecuados al contexto y, sin perder el tono que caracteriza a la marca, ha seguido publicando bien y con frecuencia pero, hablar de buena publicidad e IKEA, últimamente es casi una misma cosa.